39th Berlin Marathon 【 2012 】
Después de un verano de intensos entrenamientos bajo una calor sofocante y una humedad asfixiante la mayoría de los días, por fin llegaba el momento de enfrentarme a uno de esos retos que hacen que todo el sufrimiento pasado quede en el olvido y que sólo piense en disfrutar de uno de esas carreras irrepetibles, no sólo por la carrera en si, sino por todo lo que la rodea. Y en esta ocasión la maratón tenía todos los ingredientes para disfrutarla de principio a fin. Una, porque era mi segunda Major para la que me había preparado a conciencia y la más importante, porque la iba a correr con la persona que me inició en esto del running. Mi buen amigo Matías. Los dos valientes antes de la aventura Como es habitual en una maratón de este calibre, la carrera no empezó el Domingo, sino unos días antes con los preparativos, el viaje, acomodarse en la ciudad recogida del dorsal, etc. Los que ya habéis hecho alguna ya sabéis de lo que hablo y para los que no, pues o...